Postre típico italiano que gusta a todo el mundo. Yo no le echo nada de alcohol, porque creo que no le aporta nada. Es super cremoso y es difícil de manejar, pero el resultado merece la pena. Se recomienda hacer la cantidad justa, ya que la receta lleva huevo crudo y puede estropearse rápido.
Ingredientes (para una fuente grande):
-500 g de queso mascarpone
-Café
-4 huevos
-300 g de cantuccini (galletas con almendras)
-100 g de azúcar
-Cacao en polvo para decorar
Procedimiento:
1º Separar las yemas de las claras. Montar las claras a punto de nieve y reservar.
2º Mezclar las yemas con el azúcar y añadir el queso mascarpone. Remover todo bien e incorporar las claras manualmente removiendo con movimientos envolventes con una espátula.
3º Cubrimos la fuente con un poco de la masa y vamos poniendo los cantuccini previamente mojados en café (yo lo he bañado en leche con un poco de café soluble porque no me gusta que sepa mucho). Creamos una capa con todas las galletas y terminamos añadiendo por encima el resto de la masa.
4º Espolvoreamos un poco de cacao para decorar y metemos en la nevera.
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