Ingredientes:
-700 g de leche condensada
-200 g de harina, mejor si es de repostería
-15 g de levadura en polvo
-4 huevos
-100 ml de aceite de girasol
-200 g de nata montada
-500 ml de leche evaporada
-100 g de chocolate en tableta
-50 g de chocolate en polvo (yo he usado del que se usa para hacer a la taza)
Opcional: unas nueces peladas y unos trozos de chocolate
Proceso:
1º Primero se hace el bizcocho. Para ello ponemos 450 g de leche condensada en un recipiente y se va batiendo con unas varillas eléctricas, añadiendo los huevos de uno en uno. Después se echa el aceite y se sigue moviendo. Por último se añade poco a poco la mezcla de harina con levadura. Mezclar todo bien. Echar en un molde previamente engrasado y dejar reposar unos 15 minutos. Precalentar el horno a 180ºC y hornearlo unos 20 minutos.
2º Una vez tengamos el bizcocho lo dejamos enfriar bien para poder cortarlo después por la mitad.
Se prepara una mezcla de 250 g de leche condensada con 250 g de leche evaporada para empapar bien cada mitad del bizcocho y por encima. Si sobra mezcla no pasa nada, la podemos usar para la cobertura.
Después se rellena de nata (yo la he usado de spray ya montada pero se puede montar en casa). Además he añadido unas nueces y chocolate para darle toques crujientes.
3º Para la cobertura hay dos opciones. La primera es que si nos ha sobrado mezcla de leche condensada con leche evaporada del paso anterior podemos usarla para fundir el chocolate en un cazo, en este caso no hay que añadir azúcar.
Si no nos ha sobrado mezcla el chocolate lo fundimos a fuego lento con 250 ml de leche evaporada y podemos añadir un poco de azúcar.
4º Cuando esté todo bien disuelto lo echamos sobre la tarta repartiendo bien y lo metemos en la nevera para que se solidifique. Al final se puede decorar con bolitas de chocolate o lo que pillemos.
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