Este bizcocho jugoso y esponjoso tiene un sabor distinto en cada bocado: a limón, dulce, a nueces, a pistachos, a almendras...y por eso es diferente a todos los demás.
Ingredientes:
-3 huevos
-220 g de harina (mejor si es de repostería)
-Media cucharadita de bicarbonato
-5 g de levadura en polvo
-125 ml de leche
-Una cucharada de zumo de limón
-Ralladura de un limón
-120 g de mantequilla
-250 g de azúcar
-Pistachos, nueces y almendras. La proporción es al gusto, yo he echado más o menos 30 g de cada uno y algo más para decorar.
Proceso:
1º En un bol grande echamos la mantequilla un poco derretida, el azúcar y la ralladura de limón. Batimos todo bien hasta que quede una masa homogénea.
2º Añadimos los huevos uno a uno y seguimos batiendo hasta que se mezcle todo bien.
3º Incorporamos la leche, el zumo y los frutos secos pelados y picados. Removemos.
4º Mezclamos la harina con la levadura y el bicarbonato y la añadimos a la masa tamizada con un colador. Mezclar bien, si es necesario hacerlo manualmente con una cuchara de madera.
5º Meter en el horno precalentado a 180ºC, unos 40 minutos o hasta que esté completamente cocido. Dependerá mucho del tamaño del molde, cuanto más pequeño más tiempo necesitará.
Cuando salga del horno decoramos con otros pocos frutos secos y un poco de azúcar. También lo podemos hacer antes de meterlo en el horno.
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